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Origen del Vulcanismo en El Salvador
En el Salvador,
ubicado en el Cinturón de Fuego del Pacífico, la subducción de
la Placa de Cocos por debajo de la Placa Caribe provoca diferentes fenómenos:
por una parte una intensa actividad sísmica y por otra la fusión de
rocas de la corteza terrestre sometidas a altas temperaturas y
presiones.
El magma, resultado de la fusión de las
rocas, ascienden a través de fracturas por la Placa Caribe hasta alcanzar
la superficie, donde se producen las erupciones volcánicas y la formación
de los conos volcánicos.
La Cordillera volcánica en El Salvador
es resultado de este proceso. Si pudiéramos observarla a vista de pájaro,
como en la foto, nos daríamos cuenta de la disposición en línea de los
volcanes, una línea paralela a la costa y a la zona de subducción mar
adentro, donde se genera el magma que los forma.
Este fenómeno no ocurre solo hoy en
nuestros días, o durante los últimos años o el siglo pasado, sino que
lleva miles de años produciéndose, por lo que antes de los volcanes que
conocemos hoy ya existían
otros y antes de estos probablemente otros. De hecho, prácticamente todo
el subsuelo del país (más de un 90%) está formado por materiales volcánicos.
Por ejemplo, en los valles centrales y la Cordillera Norte, encontramos
cerros como el Cacahuatique en Morazán y la
Sierra de Guazapa en el departamento de San Salvador que los geólogos
han identificado como antiguos volcanes. |
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Los materiales más
modernos son los de la actual cordillera volcánica, donde encontramos
volcanes activos como el de San Miguel, el de Izalco, el de Santa Ana, el
de San Salvador, entre otros. Con el paso del tiempo,
estos volcanes dejarán de ser activos y se convertirán en cerros,
se erosionarán y pasarán a formar parte del relieve de El Salvador,
dejando paso a nuevos edificios volcánicos... |
La
corteza es la capa más externa del planeta formada por rocas de diferente
dureza. Si comparamos la Tierra con una manzana, tenemos que la corteza es
como la cáscara. Pero la cáscara de la manzana es lisa y continua, en
cambio la corteza es rugosa y dividida en grandes fragmentos que
denominamos placas tectónicas.
Estas placas se mueven unas respecto
a las otras por encima del manto, que es fluido o semifluido (algo así
como un pugding), y en ocasiones se separan y en otras convergen o chocan.
En los lugares donde las placas se separan tenemos las dorsales, una
especie de cadenas de volcanes, donde se genera nueva corteza terrestre
por la salida de magma al exterior, que suele encontrarse en el fondo de
los océanos. En cambio en las zonas donde las placas convergen o chocan,
como en el caso de Centroamérica y Sudamérica, las placas más densas y
pesadas (las del océano) se hunden por debajo de las continentales, donde
están los países de la región. |
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En El
Salvador, la placa de Cocos subduce por debajo de la placa del Caribe. La
corteza de la placa de Cocos al estar sometida a altas temperaturas y
presiones mientras se hunde, se va fundiendo integrándose al manto y
provocando la formación de magma. Es un proceso muy similar al que ocurre
si aplicamos una fuente de calor en una vela: la vela es sólida, dura,
pero si la calentamos la cera toma una textura como de mantequilla y si la
continuamos calentando tenemos cera líquida.
Por su parte, la Placa del Caribe
también está sometida a presión por el empuje de la Placa de Cocos y
responde a esta presión fracturándose. Algunas de estas fracturas son
aprovechadas por el magma para su salida hasta la superficie, donde se
solidifica en forma de coladas de lava o de materiales granulares que se
acumulan formando los conos volcánicos. Podemos decir, entonces, que en
estas placas la salida de magma contribuye a hacer más gruesa la corteza
terrestre. |
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